¿Sabés qué es un Dímetro Trocaíco Cataléctico con Rima Bisilábica Alternada?

¿Sabés qué es un Dímetro Trocaíco Cataléctico con Rima Bisilábica Alternada?

Yo tampoco sé qué es… pero hace años que me aprendí esta frase, y de vez en cuando la digo en clase como si fuera un trabalenguas. Como nadie la sabe, hasta hoy que preparaba estas palabras, me di cuenta de que la decía erróneamente, pues decía “catalético” y no “cataléctico” como debe ser.
En el año 569 llegó una espina de la “Vera Cruz” a manos de Radegunda, viuda del Rey franco Justiniano II. El poeta y obispo Venancius Fortunatus escribió un himno para conmemorar esto. El himno, como casi todos los nombres en la Iglesia católica, toma nombre de las primeras dos palabras: “Pange Lingua” (léase Panye lingüa), Canta Lengua. Este himno fue, posteriormente introducido en la liturgia de la Iglesia, teniendo raigambre entre el pueblo y la clerecía.
Después de profundizar cada vez más en la presencia Real de Jesucristo en la Eucaristía, alrededor del Siglo XIII el papa Urbano IV decidió instaurar la fiesta del Corpus Christi, para conmemorar de manera especial –y fuera de la Semana Santa- esta presencia real. Según escuché en una ocasión, le encargó a dos grandes teólogos de la época que escribieran toda la liturgia de la celebración: las oraciones para la misa, las oraciones de la Liturgia de las Horas, etc. Eran, ni más ni menos, Tomás de Aquino (Dominico) y Buenaventura (Juan da Fidanza, Franciscano). Aunque lo que sigue me suena un poco inventado, ejemplifica muy bien cómo pudo haber sido. Dicen que llegaron los dos con sus escritos delante del Papa. El primero que empezó a leer lo que había escrito fue Tomás: a medida que iba leyendo, el bueno de Buenaventura empezó a destruir lo que traía… no valía la pena delante de la maravilla que el gran genio de los genios de la humanidad había escrito. Todo lo que Tomás compuso se estrenó en la Misa del Corpus de 1264.
Pues entre otras maravillas de las escritas por el gran Tomás de Aquino para esa ocasión está el himno para la adoración eucarística. Tomás tomó el inicio y el ritmo del antiguo himno para adorar la Vera Cruz del Señor y lo aplicó a la presencia Real en el Sacramento (con mayúscula). Así, el “Pange Lingua”  de la Cruz, el Cantar de la Lengua a la gloriosa Cruz, se empezó a cantar también a la gloriosa presencia en la Eucaristía.
Ambos himnos son Dímetros Trocaicos Catalécticos con Rima Bisilábica Alternada. Y el segundo de ellos, el Pange Lingua de Santo Tomás se cantará completo en miles de iglesias hoy por la tarde. De hecho, es un himno que tiene 6 estrofas, de las cuales la primera y las últimas dos se cantan, en ocasiones, cuando se tiene la exposición y bendición con el Santísimo Sacramento. Las otras tres sólo se cantan durante la procesión al finalizar la Misa “in Coena Dómini” de hoy por la tarde (hoy se canta completo el himno). Más abajo lo transcribo en latín –su idioma original- y una traducción al castellano (o español), para que pueda ser meditado especialmente hoy (y en el jueves o domingo de Corpus Christi).
Otra maravilla que salió de la pluma de Tomás para esa ocasión fue el maravilloso, breve y delicado himno “Adoro te devote”, el  Te Adoro con devoción Dios escondido, que algunos tenemos la costumbre de rezar delante del Sagrario los días jueves. Hoy de manera especialísima, cuando la Iglesia conmemora la institución de este Sacramento junto con el sacramento del Orden Sacerdotal. También abajo lo transcribo.
Estos dos personajes mencionados hace un momento, Tomás y Buenaventura fueron una maravilla de intelecto. De Buenaventura sé poco. De Tomás un poco más. Hace años me leí una historia novelada sobre su vida; he estudiado algo de su pensamiento filosófico y teológico. Siempre me ha admirado su vida intelectual y su humildad. Murió de 49 años, habiendo dejado escritos más de 250 libros, que difícilmente podríamos entender; nació en una época maravillosa, cuando se recuperó para occidente a Aristóteles, y Tomás fue quien hizo esa recuperación y la síntesis de todo el conocimiento previo de la humanidad, dotando así de una filosofía que podía ayudar a la teología a dar el brinco –cuántico podríamos decir- que dio con este gran hombre: es lo que a veces se llama Síntesis Tomista. Aunque es imposible de demostrar, pero siempre me ha parecido que ha sido la persona más inteligente que ha existido (por encima de quien piensen o quieran).Pero especialmente gracias  a su delicada y tierna espiritualidad tenemos hoy la maravilla de la liturgia dedicada al Sacramento de los sacramentos. Sobra decir que la Iglesia los venera a ambos como Santos (por su excelsa santidad de vida) y Doctores de la Iglesia (por su claridad, profundidad y ortodoxia de doctrina). Santo Tomás de Aquino, además, es el Teólogo de referencia.

Latín Castellano
Pange, lingua, gloriosi
Córporis mystérium
Sanguinísque pretiósi,
Quem in mundi prétium
Fructus ventris generósi
Rex effúdit géntium.
Nobis datus, nobis natus
Ex intácta Vírgine,
Et in mundo conversátus,
Sparso verbi sémine,
Sui moras incolátus
Miro clausit órdine.
In supremæ nocte coenæ
Recumbens cum frátribus,
Observata lege plene
Cibis in legálibus,
Cibum turbæ duodenæ
Se dat súis mánibus.
Verbum caro, panem verum
Verbo carnem éfficit,
Fitque Sanguis Christi merum,
Et, si sensus déficit,
Ad firmandum cor sincerum
Sola fides súfficit.
Tantum ergo Sacraméntum,
Venerémur cérnui:
Et antíquum documentum
Novo cedat rítui;
Præstet fides suppleméntum
Sénsuum deféctui.
Genitori Genitóque,
Laus et iubilátio;
Salus, honor, virtus quoque,
Sit et benedíctio;
Procedénti ab utróque
Compar sit laudátio.
Amen.
Canta, mi lengua,
el Sacramento glorioso del cuerpo
y de la sangre preciosa
que el Rey de las naciones,
Fruto de un vientre generoso,
Derramó como rescate del mundo.
Nos fue dado,
nos nació de una Virgen sin mancha;
y después de pasar su vida en el mundo,
una vez propagada la semilla de su palabra,
Terminó el tiempo de su destierro
Dando una admirable disposición.
En la noche de la Última Cena,
Sentado a la mesa con sus hermanos,
Después de observar plenamente
La ley sobre la comida legal,
se da con sus propias manos
Como alimento para los doce.
El Verbo encarnado, pan verdadero,
lo convierte con su palabra en su carne,
y el vino puro se convierte en la sangre de Cristo.
Y aunque fallan los sentidos,
Solo la fe es suficiente
para fortalecer el corazón en la verdad.
Veneremos, pues,
Postrados tan grande Sacramento;
y la antigua imagen ceda el lugar
al nuevo rito;
la fe reemplace
La incapacidad de los sentidos.
Al Padre y al Hijo
sean dadas alabanza y gloria,
Fortaleza, honor,
poder y bendición;
una gloria igual sea dada a
aquel que de uno y de otro procede.
Amén.

Latín Castellano
Adoro te devote, latens Deitas,
Quae sub his figuris vere latitas:
Tibi se cor meum totum subiicit,
Quia te contemplans totum deficit.
Visus, tactus, gustus in te fallitur,
Sed auditu solo tuto creditur.
Credo quidquid dixit DeiFilius:
Nil hoc verbo Veritatisverius.
In cruce latebat solaDeitas,
At hic latet simul ethumanitas;
Ambo tamen credens atque confitens,
Peto quod petivit latro paenitens.
Plagas, sicut Thomas, non intueor;
Deum tamen meum te confiteor.
Fac me tibi semper magis credere,
In te spem habere, te diligere.
O memoriale mortisDomini!
Panis vivus, vitam praestans homini!
Praesta meae menti de te vivere
Et te illi semper dulce sapere.
Pie pellicane, Iesu Domine,
Me immundum munda tuo sanguine.
Cuius una stilla salvum facere
Totum mundum quit ab omni scelere.
Iesu, quem velatum nunc aspicio,
Oro fiat illud quod tam sitio;
Ut te revelata cernens facie,
Visu sim beatus tuaegloriae.
Amen
Te adoro con devoción, Dios escondido,
oculto verdaderamente bajo estas apariencias.
A Ti se somete mi corazón por completo,
y se rinde totalmente al contemplarte.
Al juzgar de Ti, se equivocan la vista, el tacto, el gusto;
pero basta el oído para creer con firmeza;
creo todo lo que ha dicho el Hijo de Dios:
nada es más verdadero que esta Palabra de verdad.
En la Cruz se escondía sólo la Divinidad,
pero aquí se esconde también la Humanidad;
sin embargo, creo y confieso ambas cosas,
y pido lo que pidió aquel ladrón arrepentido.
No veo las llagas como las vio Tomás
pero confieso que eres mi Dios:
haz que yo crea más y más en Ti,
que en Ti espere y que te ame.
¡Memorial de la muerte del Señor!
Pan vivo que das vida al hombre:
concede a mi alma que de Ti viva
y que siempre saboree tu dulzura.
Señor Jesús, Pelícano bueno,
límpiame a mí, inmundo, con tu Sangre,
de la que una sola gota puede liberar
de todos los crímenes al mundo entero.
Jesús, a quien ahora veo oculto, te ruego,
que se cumpla lo que tanto ansío:
que al mirar tu rostro cara a cara,
sea yo feliz viendo tu gloria.
Amén

(Ambos textos los tomé de Wikipedia)

Si te interesa profundizar en la métrica latina, me encontré una página… http://interclassica.um.es/var/plain/storage/original/application/a35b63ec744e3d60188720ca08520e28.pdf