Hace poco más de un semestre, tuve la oportunidad de celebrar las 2,000 sesiones (clases) que he dado en el IPADE en sus diversas sedes. Como era lógico, fue un aniversario muy personal, pero mis «alumnos» de Guadalajara tuvieron a bien celebrarme ese día con algunos detalles.
Fue un día muy simpático de celebración, pero también de sesiones normales, porque debido a eso había logrado llegar a esa cantidad de sesiones.
Fue más o menos a partir de 1998 que empecé a llevar el control del número de sesiones que doy. Como saben, son ordinariamente sesiones de 1:20 horas, con un tema a desarrollar en cada una de ellas.
La mayor parte de las sesiones me toca darlas en México.
Pero también doy muchas sesiones en Guatemala, en lo que yo sigo llamando Tayasal, aunque su nombre oficial es UNIS BUSINESS SCHOOL (espero haberlo escrito bien).
De hecho, doy sesiones en esta escuela de Guatemala desde 1990. Pero en esa época no había forma de ir llevando un excel con el control de las sesiones, así que empecé a llevarlo hasta algunos años después. De hecho, al mismo tiempo que empecé a llevar el control de la sesiones en el IPADE, 1998. Así que desde 1998 a la fecha (el sábado 11 de marzo) llevaré, si Dios quiere, 1000 sesiones en Guatemala, en la Escuela de Negocios.
Prácticamente el doble de sesiones en México que en Guatemala.
Dar sesiones en Guatemala, con grupos más pequeños, en un ambiente un poco más informal que en México me ha servido mucho. De hecho, a veces hago pruebas de ideas que sería muy difícil de hacer en México. Y que si salen bien, las aplico en México; y si salen mal… pues hasta ahorita no he tenido ninguna que haya salido mal…
Lo que también es interesante es cómo siempre (lo insisto, siempre) en cualquier lado, el que más aprende es el profesor. Hace poco volví a experimentarlo con un grupo precisamente en Guatemala. Cómo una pregunta, una inquietud, un aparente fallo, se convierte en una ocasión para descubrir cosas.
En fin, mil gracias (nunca mejor dicho) a todos aquellos a los que me han ayudado en estos 19 años para completar las 1,000 sesiones. Muy agradecido con ellos. Y también, perdón por si alguna vez no he respondido a las expectativas.
Por supuesto que estoy más agradecido con Dios por haberme permitido llegar (espero llegar al sábado) a este número redondo, y completar más de 3,000 sesiones en las dos escuelas de negocios que llevo profundamente grabadas en mi corazón.
Mil gracias Tayasal (UBS).