Hace unos días me tocó dar, ante diversos grupos de Maestría en Dirección de Empresas para Ejecutivos con Experiencia, el caso RMS Titanic, que tuve la oportunidad de coautorar con mi amigo y colega Saulo.
El caso, sustituyó el que usábamos anteriormente en el mismo curso de Análisis de Decisiones.
Es un caso muy simpático, porque casi todos los participantes conocen del RMS Titanic, han visto la famosa película del mismo nombre, etc.
Aunque el caso es simpático, la historia en sí no lo es. Fallecieron alrededor de 2,000 personas. Una verdadera tragedia.
No sé qué pensarán mis alumnos cuando ven que el caso que tienen que leer es de algo que «ya conocen».
Lo que sí me han comentado, es que el caso les aporta muchísimos datos que no conocían.
Y eso que es un casito de sólo 9 páginas de texto (más unos cuantos anexos, totalizando 15 páginas). ¡La de libros e historias que hay sobre este famoso barco, y de su trágico primer viaje.
Ordinariamente los recibo con mi gorra de Capitán (la foto de portada es muy reciente), obsequio de mi querido Walter, un participante del Medex de Guadalajara… y con la canción oficial de la película, interpretada por Celine Dion.
Royal Mail Ship significa las siglas RMS que acompañan al nombre del Titanic, un barco del correo real.
Como quizá sepas, el Titinac era el segundo barco de la serie Olympic que la Línea Marítima White Star habían decidido construir: el Olympic, el Titanic y el Gigantic, nombres provenientes de la mitología griega.
Barcos que eran más o menos del doble de tamaño de los barcos más grandes que existían hasta el momento.
En una época en la que el transporte de personas de Europa hacia América se había incrementado de manera espectacular (estamos a inicios de la década de 1910).
Especialmente el crecimiento de la demanda de pasaje era sólo de ida, del viejo continente al nuevo.
Y, aunque la mayoría de los pasajeros eran aquellos que compraban boletos sólo de ida, la White Star se propuso construir una tercera clase de calidad.
En el RMS Titanic, éstos, tenían muchas comodidades, más que en las de cualquier otra línea marítima: tenían 4 comidas servidas, no tenían que llevar sábanas, ni cubiertos, etc.
Dicen que en el RSM Titanic, los pasajeros de 3era clase recibían un menú impreso, que en la parte de atrás podían escribir algunas palabras para usarlas como postales (espero que todos recuerden qué «era» una postal)…
Me impresionó el enorme sentido comercial de JP Morgan, el banquero estadounidense dueño de la White Star, y principal cerebro de estas operaciones.
De hecho, en el RMS Titanic, don JP se había hecho construir una suite de «más» que primera clase, que tenía hasta una terraza para ella.
No viajó Mr. Morgan, porque se enfermó y canceló su traslado.
Creo que desde aquí -o antes- surgen las teorías conspiracionistas alrededor de este barco y su accidente fatal.
Así que si uno se pone a buscar, hay explicaciones de todo estilo sobre el accidente.
El Comodoro Smith
El Comodoro Smith, era el capitán más experimentado de la White Star, y tenía, por su condición de Comodoro, el honor de dirigir los viajes inaugurales de los nuevos barcos.
Así, el Capitán Smith dirigió los viajes inaugurales de los 4 grandes barcos (previos a la serie Olympic), y los viajes inaugurales del Olympic y el del RMS Titanic.
Se cuenta que para el primer viaje del Olympic al frente del cual iba nuestro conocido Capitán Smith, al pasar este gran barco al lado de otro barco anclado, éste empezó a dirigirse hacia el Olympic hasta que lo impactó.
Dieron la vuelta para revisar el Olympic, que no había sufrido mayores consecuencias y, luego, recomenzaron el viaje.
Esto le volvió a suceder al Capitán Smith con la salida del Titanic, aunque, en esta segunda ocasión, y habiendo tenido ya la experiencia del Olympic, el Comodoro dió la orden de virar y lograron esquivar el barco que se les venía encima.
(Según otras fuentes, fue el «práctico» del puerto quien logró dar marcha atrás para evitar el accidente contra el Barco «New York», atado al puerto)
Este efecto físico nunca había pasado en barcos, aunque ya tenía una explicación con las fórmulas de Bernoulli, Euler y el efecto Venturi.
¡Era tan grande el Titanic que lograba mover de su lugar a barcos anclados o amarrados al puerto!
Por cierto, la serie Olympic era el doble de segura que cualquier otro barco existente.
Todo parece indicar que ante los avisos de Iceberg en el camino, la actuación del Capitán Smith fue la que indicaban los protocolos en la época.
No se conocía un accidente fatal de un barco contra un iceberg. El Titanic fue el primero.
Y de este «accidente» tan desastroso se aprendió mucho. Protocolos de seguridad, de diseño, de salvamento, de comunicación, etc., son producto de este accidente de hace casi 110 años.
Rescate del Carpathia
Se dice que llegaron 12 barcos a rescatar a los pasajeros del Titanic.
Aunque ya el Carpathia había recogido a los supervivientes.
El Capitán Rostron -del Carpathia- se encontraba dormido cuando su primer oficial entró a su camarote sin haber tocado la puerta.
Éste había recibido un aviso del telegrafista que decía que el Titanic se estaba hundiendo.
Rostron, inmediatamente pide que den vuelta para ir a rescatarlos. Parece que hasta después preguntó «si era el Titanic el que se estaba hundiendo». La fama de inhundible había perseguido a este barco.
Decisiones de Smith
Unos autores mencionan que en un momento determinado el Capitán Smith dejó de dar órdenes adecuadamente.
Todo parece indicar que cuando éste cayó en cuenta de que efectivamente se iban a hundir, y sabiendo que sólo había 20 botes -insuficientes para 2223 pasajeros y 885 tripulantes- hubo tal shock que su dirección se vino abajo.
No necesariamente quien sabe dirigir en la bonanza es bueno para dirigir en momentos de crisis.
Y esto pasa en las empresas también.
Habiendo estado acostumbrados a dirigir en épocas ordinarias, cuando la crisis se avecina, quizá no se sabe cómo reaccionar.
Quizá con las decisiones adecuadas del Capitán Smith se hubieran podido salvar muchas más vidas.
Dar la vida por la de los demás.
Hubo otras personas que dieron la vida por los supervivientes.
El Titanic mantuvo la energía eléctrica durante las casi tres horas que duró el hundimiento.
Esto, gracias a los ingenieros que mantuvieron las calderas funcionando para que pudiera tener luz eléctrica mientras se hacía la evacuación.
Sabían que no tenían salvación, pero dieron su vida por los demás. Un ejemplo de heroísmo.
También fueron héroes los músicos que estuvieron tocando al aire libre en esos trágicos momentos. Siempre salen homenajeados en todas las películas y los libros.
Uno de los Villanos
Cuando tenemos en sesión el caso Titanic, analizamos mucho uno de los Cuatro Villanos en la Toma de Decisiones.
Específicamente la «Confianza desmedida». Un sesgo que nos lleva a no pensar que algo puede salir mal.
Y esto nos lleva a no estar preparados para el error, para los accidentes, para la crisis.
Y esto también sucede en las empresas.
De hecho, los Villanos provienen de un estudio que los hermanos Heath hicieron entre emprendedores, directores y empresarios.
Hay muchas cosas más que se pueden escribir acerca del Titanic.
He querido sólo hacer referencia a algunos hechos y reflexiones sobre las últimas veces que he dado el caso en el IPADE en México y en la Unis Business School en Guatemala.
Nos vemos pronto.
Este caso sí me gustó!!
Buenísima referencia de los hechos, de lo que sucedió en el Titanic…
Sólo quiero hacer notar, que este Capitán, es más guapo, que el del Titanic…
Seguramente el impacto del caso es tan positivo como lo es la presentación de uno de sus autores, cuya fotografía insertó en este artículo. Felicidades Javier.
He tenido la fortuna de tomar el caso en la sesión plenaria y tratar de identificar la teoría de la toma de decisiones con los hechos, no siempre en tan sencillo, pero tiene mucho valor cuando es posible analizarlos con este tipo de casos, muy simpáticos !!!
Trabajar este caso con Javier en plenaria ha sido un privilegio, debí visitar esta sección antes de la sesión LOL