“El prejuicio profesional es un sesgo o juicio preconcebido que surge de la formación, experiencia o identidad profesional de una persona, que puede influir en cómo percibe, interpreta o actúa frente a situaciones, problemas o personas.”. (ChatGPT Dixit).
Llevaba varios días preparando este post y lo que había escrito de primera instancia no me había gustado mucho, porque no encontraba alguna forma novedosa de empezar y luego estructurar estas palabras.
Por eso del prejuicio profesional, andaba viendo/escuchando/leyendo cosas para sacar la idea clave para este post.
Y sucedió donde menos lo esperaba. Estábamos en la cena de Navidad del IPADE el pasado 6 de diciembre. Oíamos a Lorenzo dar su breve discurso donde hacía, obviamente, referencia a la Navidad.
Y en eso, Miguel -mi vecino en la mesa, amigo, colega, socio- me dice algo así: “a veces me pregunto cómo habrá sido el nacimiento de Jesús. Y cómo habrá sido ver y oír a los ángeles cantar el Gloria por primera vez en la historia”.
Y en eso me cayó el veinte. El prejuicio profesional volvió a funcionar. Además de que la frase me encantó y me ha servido desde esa noche, para tratar de hablar con Jesús y prepararme más y mejor para la Navidad.
Preparación para la Navidad
Tengo un buen amigo que hace poco me escribía: “Personalmente soy un ferviente promotor del tiempo del Adviento, que en la cultura ha sido sepultado por una celebración anticipada de la Navidad o ‘Temporada navideña’”.
El tiempo de Adviento es un tiempo de preparación para la Navidad, día alrededor de lo que gira todo: el 25 de diciembre.
Al mismo tiempo, la alegría de la Navidad es tan grande que anticipamos la celebración. Quizá no sea lo más adecuado y conveniente, pero así ha estado pasando en la cultura actual, por lo que hay que aprovechar esa circunstancia. Es el conmemorar el nacimiento del Hijo de Dios.
Quizá podría ser interesante tratar de sacar provecho a todas las actividades pre-navideñas para preparar verdaderamente la Navidad: convivencia, plática, preparación espiritual, actividad familiar, etc. Que todo realmente gire alrededor de la conmemoración del nacimiento del Hijo de Dios.
Yo empiezo a oír villancicos a partir del primer domingo de Adviento; y los pasó oyendo hasta que termina el tiempo litúrgico de Navidad. Y podríamos pensar que los Ángeles habrán cantado un poco mejor que Bubble, Croby, Presley y todos aquellos que cantan a la Navidad.
Felicitación de Navidad
Mi amigo Gerardo siempre ha sido retrechero para recibir felicitaciones navideñas previas a la Navidad. Así que a él le mando todo el mismo día 25. Con las demás personas siempre procuro enviar mi felicitación con algo de tiempo, confiando que lo que envío pueda ayudar a preparar la Navidad.
Antiguamente se acostumbraba a enviar felicitaciones físicas de Navidad, las famosas tarjetas de Navidad. Ahora, eso ha disminuido por la facilidad de enviar felicitaciones electrónicas. Eso sí, siempre recomiendo que las tarjetas que se envían sean verdaderamente de Navidad -el nacimiento de Jesús- y no de otros signos que han abarrotado ahora la navidad como el tal Santa Claus o los renos (que no hay muchos por estas tierras); o aún peor, cuando dicen las “fiestas decembrinas” …
Desde hace algunos años procuro escribir un post sobre la Navidad y de ese post hago un extracto para hacer mi felicitación navideña.
Como tengo una diseñadora exclusiva de fotos, stickers, anuncios, etc., me resulta fácil que me consiga una bonita imagen de la Sagrada Familia ad-hoc para usar en la portada de este post, así como para la tarjeta que mando a través de las redes. Aprovecho para agradecer a mi hermana Claudia, quien me hace todas estas cosas bellas.
Este año he incluido el QR en la felicitación navideña para que puedan leer este post. (Al final ya no incluí el QR en la felicitación de Navidad… se arruinaba)
Navidad especial
Esta Navidad será para mí muy especial porque es mi Navidad número 60. Si Dios me da vida, el próximo enero llegaré al sexto piso o nivel.
Así que, siendo una celebración redonda, quiero aprovechar para que la Navidad sea una gran celebración personal.
No pongo más de los 60 porque espero escribir algo específico para ese onomástico.
Dos consideraciones
Como estamos bombardeados de tantas ideas en estos días, sólo quiero poner dos ideas más.
“Corazón siempre fiel hoy has vuelto a nacer. Contigo iré a donde quieras” decía el texto de un villancico (autor Mariano Pérez García).
Jesús, el fiel, el que no traiciona, el que siempre está a nuestro lado, vuelve a nacer. Esperémoslo. Ese Niño nacerá de nuevo en nuestro corazón: imaginemos cómo fue ese nacimiento.
Y la segunda cosa, es una de las oraciones de la misa durante esta época de Adviento: “Concede a tus fieles, Dios todopoderoso, el deseo de salir acompañados de buenas obras al encuentro de Cristo que viene, para que, colocados a su derecha, merezcan poseer el reino de los cielos”: toda nuestra existencia es un tiempo de espera hasta ese gran día en que Jesús vendrá para llevarnos junto a sí. Por eso, como preparación a ese encuentro, la sabiduría de la Iglesia nos hace suplicar a Dios un mayor deseo de hacer el bien.
Te deseo una Feliz Navidad al lado de los tuyos.
Que Nuestro Señor, que nace en Belén, además nazca en nuestros corazones; y que el nuestro lata al unísono de su Sagrado Corazón durante todo el año 2025 que Dios nos tiene preparados.
Javier Enrique Duarte Schlageter
En su Navidad número 60